La misión del condensador, en los sistemas de encendido clásicos es amortiguar la chispa de la extracorriente de apertura (cuando los platinos se abren empujados por la leva giratoria) , generada por la inducción de la bobina.
De este modo, se trataba de proteger a los platinos frente a la “migración” de material en los propios contactos, disminuyendo los cráteres que se producían y aumentando, por tanto, su vida útil.
Los encendidos FEMSA de las Bultaco llevan un condenador FEMSA de 0,25 microfaradios como este, (18x31mm):
Al contrario que ocurre con los platinos, la vida de los condensadores debe ser muy larga, para comprobar su estado basta medir su aislamiento eléctrico con un polímetro en la escala mayor. No obstante ante la duda, mejor cambiarlos pues es un componente relativamente barato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario